Entrevista con la Diosa Dragón - Parte 2: El Origen de los Humanos
Regresar al Indice de la Entrevista
Anterior - Parte 1: El Comienzo
Después de unos minutos en silencio, habló de nuevo. - No aceptó mi decisión de dejarlo, así que me persiguió. Exigía que regresara con él, pero me rehusé. Siguió insistiendo hasta que se cansó y trató de obligarme. - Sonrió con satisfacción. - Nunca había competido de verdad con él en nada, pero en esta ocasión decidí contra atacar con todas mis fuerzas. Peleamos por los cielos durante un tiempo, hasta que le di un golpe sólido y certero en la cabeza. Cayó y lo seguí. En cuanto golpeó el suelo, aterricé con mis rodillas sobre sus antebrazos, y mis manos en su cara, con las garras de mis pulgares listas para sacarle los ojos si decidía seguir peleando. Se quedó inmóvil, saboreando la derrota por primera vez. Fue entonces que El Creador intervino.
Dejó escapar un suspiro al mismo tiempo que regresaba a su expresión de aburrimiento. - Trató de ayudar a reconciliarnos, pero yo no estaba dispuesta. No era la única deidad a la que le incomodaba su compañía, así que evidentemente no era yo quien estaba mal. Dejé muy claro que quería que me dejaran sola y libre, mientras que Amaxis aun me quería de regreso con él, pero no estaba dispuesto a disculparse ni admitir que había hecho mal. El Creador decidió hacerle una nueva pareja, una que lo amaría incondicionalmente y no lo abandonaría sin importar cómo la tratara. Su nombre era Humenalia. El Creador puso una única condición para crearla: Amaxis sería quien la instruyera acerca del funcionamiento del mundo, tal y como El Creador nos había instruido cuando fuimos creados. Amaxis iba a ser el amo y guardián de Humenalia.
- Humenalia...- Dije aprovechando su silencio momentáneo, - ese nombre suena como "humano", asumo que nos estamos acercando a esa parte, ¿correcto?
La Diosa asintió. - Amaxis pensó que era demasiado tonta para ser instruida, y él era demasiado perezoso para dedicar el tiempo necesario para hacerlo adecuadamente, así que sobresimplificó las cosas. Las leyes de Causa y Efecto, hacerse responsable de sus propios actos y otros conceptos importantes como pensar antes de tomar acción no le fueron enseñados de manera adecuada. En lugar de ello, Amaxis creó "Pecados" y "Tabúes" y Reglas que ella debía seguir sin cuestionar, y la amenazaba con castigos horribles que caerían sobre ella si las quebrantaba. Usó el miedo para educarla y controlarla. Ella no era nada tonta, y pronto empezó a cuestionar las reglas que se le impusieron.
- Eso es exactamente como el estado actual de la situación entre Amaxis y los mortales. - Agregué. Ella siguió hablando. - No pasó mucho tiempo para que Humenalia rompiera una regla por accidente. Causó un incendio forestal, el cual incineró miles de árboles y criaturas del bosque, y no recibió ningún castigo horrible. Viendo que las consecuencias esperadas no sucedieron, deliberadamente incendió otro bosque. De nuevo no obtuvo castigo alguno. Entonces puso a prueba las demás reglas, causando devastación con ello. Fue algo catastrófico.
- ¿No recibió ningún castigo? - Me pregunté. - ¡Claro que recibió uno! - respondió Draxenath. - El Creador la llamó y cuestionó sus acciones. Ella le habló de las prohibiciones puestas por Amaxis, y el que ninguna de las consecuencias que él mencionó eran verdad. El Creador llamó a Amaxis y lo cuestionó. Amaxis culpó de todo a Humenalia por desobedecerlo. Dijo que independientemente de que sus explicaciones fueran verdad o no, seguir sus instrucciones sin cuestionarlas habría prevenido el caos que desató.
- El Creador estaba triste, Amaxis era su favorito y esperaba mucho de él, pero era el momento de darle un castigo adecuado. "No te quisiste reconciliar con tu pareja original, así que te hice una nueva tal como la querías. Y aun así no la amas, la culpas por las consecuencias de tus propios errores. Tu orgullo te ha cerrado los ojos, voy a despojarte de todo como castigo." Le quitó a Amaxis su habilidad de transformarse en dragón, dejándolo en su Forma Divina, que es como llamamos a la forma en que me encuentro en este momento. Sus escamas, cuernos, garras, alas y cola se le cayeron. Su aliento de fuego se extinguió. La mayoría de sus dientes perdieron el filo. Quedó reducido a una criatura pequeña e indefensa. Humenalia contempló a su pareja por un momento, luego le rogó al Creador. "Hazme lo mismo... quiero compartir ese peso con él porque somos pareja, estamos para apoyarnos el uno al otro en las buenas y en las malas."
- El Creador asintió ante el noble gesto de Humenalia y le hizo lo mismo. "Como parte del castigo, los hijos que tengan estarán tan indefensos como ustedes, y no heredarán su inmortalidad. Estarán condenados a vivir para siempre y ver a sus descendientes marchitarse hasta desaparecer."
- Amaxis mantuvo la calma y le respondió al Creador. "Incluso con este castigo, mis descendientes heredarán mi grandeza, habrán de ser tan astutos como yo y gobernarán el mundo algún día." Ese es el origen de la raza humana.
Siguiente - Parte 3: El Conflicto
Regresar al Indice de la Entrevista
Anterior - Parte 1: El Comienzo
Después de unos minutos en silencio, habló de nuevo. - No aceptó mi decisión de dejarlo, así que me persiguió. Exigía que regresara con él, pero me rehusé. Siguió insistiendo hasta que se cansó y trató de obligarme. - Sonrió con satisfacción. - Nunca había competido de verdad con él en nada, pero en esta ocasión decidí contra atacar con todas mis fuerzas. Peleamos por los cielos durante un tiempo, hasta que le di un golpe sólido y certero en la cabeza. Cayó y lo seguí. En cuanto golpeó el suelo, aterricé con mis rodillas sobre sus antebrazos, y mis manos en su cara, con las garras de mis pulgares listas para sacarle los ojos si decidía seguir peleando. Se quedó inmóvil, saboreando la derrota por primera vez. Fue entonces que El Creador intervino.
Dejó escapar un suspiro al mismo tiempo que regresaba a su expresión de aburrimiento. - Trató de ayudar a reconciliarnos, pero yo no estaba dispuesta. No era la única deidad a la que le incomodaba su compañía, así que evidentemente no era yo quien estaba mal. Dejé muy claro que quería que me dejaran sola y libre, mientras que Amaxis aun me quería de regreso con él, pero no estaba dispuesto a disculparse ni admitir que había hecho mal. El Creador decidió hacerle una nueva pareja, una que lo amaría incondicionalmente y no lo abandonaría sin importar cómo la tratara. Su nombre era Humenalia. El Creador puso una única condición para crearla: Amaxis sería quien la instruyera acerca del funcionamiento del mundo, tal y como El Creador nos había instruido cuando fuimos creados. Amaxis iba a ser el amo y guardián de Humenalia.
- Humenalia...- Dije aprovechando su silencio momentáneo, - ese nombre suena como "humano", asumo que nos estamos acercando a esa parte, ¿correcto?
La Diosa asintió. - Amaxis pensó que era demasiado tonta para ser instruida, y él era demasiado perezoso para dedicar el tiempo necesario para hacerlo adecuadamente, así que sobresimplificó las cosas. Las leyes de Causa y Efecto, hacerse responsable de sus propios actos y otros conceptos importantes como pensar antes de tomar acción no le fueron enseñados de manera adecuada. En lugar de ello, Amaxis creó "Pecados" y "Tabúes" y Reglas que ella debía seguir sin cuestionar, y la amenazaba con castigos horribles que caerían sobre ella si las quebrantaba. Usó el miedo para educarla y controlarla. Ella no era nada tonta, y pronto empezó a cuestionar las reglas que se le impusieron.
- Eso es exactamente como el estado actual de la situación entre Amaxis y los mortales. - Agregué. Ella siguió hablando. - No pasó mucho tiempo para que Humenalia rompiera una regla por accidente. Causó un incendio forestal, el cual incineró miles de árboles y criaturas del bosque, y no recibió ningún castigo horrible. Viendo que las consecuencias esperadas no sucedieron, deliberadamente incendió otro bosque. De nuevo no obtuvo castigo alguno. Entonces puso a prueba las demás reglas, causando devastación con ello. Fue algo catastrófico.
- ¿No recibió ningún castigo? - Me pregunté. - ¡Claro que recibió uno! - respondió Draxenath. - El Creador la llamó y cuestionó sus acciones. Ella le habló de las prohibiciones puestas por Amaxis, y el que ninguna de las consecuencias que él mencionó eran verdad. El Creador llamó a Amaxis y lo cuestionó. Amaxis culpó de todo a Humenalia por desobedecerlo. Dijo que independientemente de que sus explicaciones fueran verdad o no, seguir sus instrucciones sin cuestionarlas habría prevenido el caos que desató.
- El Creador estaba triste, Amaxis era su favorito y esperaba mucho de él, pero era el momento de darle un castigo adecuado. "No te quisiste reconciliar con tu pareja original, así que te hice una nueva tal como la querías. Y aun así no la amas, la culpas por las consecuencias de tus propios errores. Tu orgullo te ha cerrado los ojos, voy a despojarte de todo como castigo." Le quitó a Amaxis su habilidad de transformarse en dragón, dejándolo en su Forma Divina, que es como llamamos a la forma en que me encuentro en este momento. Sus escamas, cuernos, garras, alas y cola se le cayeron. Su aliento de fuego se extinguió. La mayoría de sus dientes perdieron el filo. Quedó reducido a una criatura pequeña e indefensa. Humenalia contempló a su pareja por un momento, luego le rogó al Creador. "Hazme lo mismo... quiero compartir ese peso con él porque somos pareja, estamos para apoyarnos el uno al otro en las buenas y en las malas."
- El Creador asintió ante el noble gesto de Humenalia y le hizo lo mismo. "Como parte del castigo, los hijos que tengan estarán tan indefensos como ustedes, y no heredarán su inmortalidad. Estarán condenados a vivir para siempre y ver a sus descendientes marchitarse hasta desaparecer."
- Amaxis mantuvo la calma y le respondió al Creador. "Incluso con este castigo, mis descendientes heredarán mi grandeza, habrán de ser tan astutos como yo y gobernarán el mundo algún día." Ese es el origen de la raza humana.
Siguiente - Parte 3: El Conflicto
Regresar al Indice de la Entrevista
Comentarios
Publicar un comentario