Entrevista con la Diosa Dragón - Parte 1: El Comienzo
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Estaba tan emocionado y nervioso que mi mente quedó completamente en blanco. Tenía tantas preguntas antes de reunirme con ella, pero todas ellas se me habían escapado de momento, así que procedí con una pregunta muy básica. - Por favor cuénteme acerca de usted, si podría presentarse, y decirme el origen de su existencia. No hay información escrita que pudiera encontrar, pero se habla de usted en susurros. Se nos dice que Amaxis es el único Dios de nuestro mundo así que me gustaría escuchar su versión de la historia.
Me miró con algo de escepticismo. - El Creador me hizo al mismo tiempo que a Amaxis y me nombró Draxenath. En los planes originales del Creador, éramos los últimos dioses que iba a hacer. Seríamos la cumbre de su proceso creativo, nuestro propósito era inspirar a los otros Dioses, ser el ideal que ellos trataran de alcanzar para lograr su máximo potencial. Más fuertes que los Dioses Gigantes, más fieros que los Dioses Bestias, más diligentes que los Dioses Insectos, y más pacientes que los Dioses Marinos. - Sonrió con una pinta de ironía. - El Creador no esperaba que en vez de eso los haríamos mostrar lo peor de cada uno.
Ahí está, una confirmación de la existencia de Dioses para los gigantes, bestias, insectos y vida marina, y no solo eso, un "Creador", ¡una especie de Súper Dios! - ¡Cuénteme más acerca del Creador! ¿Cómo es él?
La Diosa Dragón se puso triste al escuchar mi pregunta. - El Creador ama a toda su creación, sabe que no es lo que esperaba que fuera originalmene, pero ya no piensa volver a interferir. Su intención es dejar que las cosas caigan por su propio peso, sin importar cuánto tiempo tarde y qué tenga que suceder. Tiene la creencia de que haremos lo correcto, y que lo que sea que suceda al final, será el mejor resultado que pueda haber sido. - La sonrisa de ironía regresó a su rostro. - No puedo negar que el conflicto que surgió nos presionó a todos a dar lo mejor que teníamos.
El conflicto, la confrontación entre los Dioses, ¡aquella en la que se nos dice que Amaxis emergió victorioso! ¡Qué gran oportunidad para conocer los detalles del conflicto! - Se nos dice que Amaxis venció a unos Grandes Demonios y que así es como al fin se lograron la paz y unidad. Usted está mencionando un conflicto, el cual supongo que se trata del mismo y que aquellos supuestos Grandes Demonios eran en realidad los otros Dioses. Estoy muy interesado en conocer cómo empezó el conflicto, y todos los detalles importantes acerca de éste.
- Esa es una historia muy larga, pero te puedo contar los eventos más importantes. Todo empezó el día que fuimos hechos. El Creador nos presentó ante los otros Dioses. "He aquí los Dioses Dragones, los más grandes de mi creación. Todos ustedes habrán de alabarlos, admirar su esplendor y aprender de ellos, pues ellos serán sus amos y guías. Ustedes habrán de servirles y ayudarles en su tarea de dirigir el Mundo en el camino del mejoramiento constante en busca de la perfección.", les dijo. Esas palabras llenaron de temor mi corazón, era una gran responsabilidad. Amaxis lo notó y me reconfortó con una sonrisa alentadora.
- ¡Un momento! - La interrumpí. - ¿Amaxis era originalmente un Dios Dragón? ¿Cómo es que...? está bien, supongo que eventualmente llegaremos a esa parte. Perdóneme, por favor siga.
- Cada uno de los Dioses masculinos quiso medirse contra Amaxis, - continuó, - y literalmente los humilló en su propio juego. No lo tomaron para nada bien. Se hizo adicto al sentimiento de vencer a los demás, de demostrar que era mejor que los demás. Con el tiempo, se aburrió de ellos y buscó un oponente más fuerte contra quien competir. Desafortunadamente, yo era el único ser digno de semejante "honor".
Hizo una pausa, su tristeza regresó por un momento, luego se convirtió en ira. - Yo no trataba de competir contra él de ninguna manera, sin embargo él convirtió en una competencia todo aquello que hacíamos juntos, seguido de comentarios desalentadores y humillantes. Me cansé de su abuso constante. Un día, estábamos viendo la puesta del sol. A pesar de nuestros pleitos, él era muy bueno para compensarme por ellos con momentos como ese, pero en esa ocasión algo fue diferente. "La belleza de la puesta de sol es como nosotros dos juntos.", me dijo. "Mis escamas rojas son como el cielo carmesí, algo bello y que vale la pena observar, mientras que tus escamas doradas son como el sol, ¡hacen daño a los ojos!" Eso fue muy cruel, hirió mis sentimientos. ¡Fuimos creados para estar juntos! ¡No lo podía soportar más, así que emprendí vuelo y lo abandoné, ya no quería estar con él ni un momento más!
Su voz se quebró mientras dijo esas últimas palabras. Se quedó callada y de brazos cruzados por un momento, sus ojos llenándose de lágrimas. Decidí no presionarla y esperé hasta que decidiera continuar.
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Estaba tan emocionado y nervioso que mi mente quedó completamente en blanco. Tenía tantas preguntas antes de reunirme con ella, pero todas ellas se me habían escapado de momento, así que procedí con una pregunta muy básica. - Por favor cuénteme acerca de usted, si podría presentarse, y decirme el origen de su existencia. No hay información escrita que pudiera encontrar, pero se habla de usted en susurros. Se nos dice que Amaxis es el único Dios de nuestro mundo así que me gustaría escuchar su versión de la historia.
Me miró con algo de escepticismo. - El Creador me hizo al mismo tiempo que a Amaxis y me nombró Draxenath. En los planes originales del Creador, éramos los últimos dioses que iba a hacer. Seríamos la cumbre de su proceso creativo, nuestro propósito era inspirar a los otros Dioses, ser el ideal que ellos trataran de alcanzar para lograr su máximo potencial. Más fuertes que los Dioses Gigantes, más fieros que los Dioses Bestias, más diligentes que los Dioses Insectos, y más pacientes que los Dioses Marinos. - Sonrió con una pinta de ironía. - El Creador no esperaba que en vez de eso los haríamos mostrar lo peor de cada uno.
Ahí está, una confirmación de la existencia de Dioses para los gigantes, bestias, insectos y vida marina, y no solo eso, un "Creador", ¡una especie de Súper Dios! - ¡Cuénteme más acerca del Creador! ¿Cómo es él?
La Diosa Dragón se puso triste al escuchar mi pregunta. - El Creador ama a toda su creación, sabe que no es lo que esperaba que fuera originalmene, pero ya no piensa volver a interferir. Su intención es dejar que las cosas caigan por su propio peso, sin importar cuánto tiempo tarde y qué tenga que suceder. Tiene la creencia de que haremos lo correcto, y que lo que sea que suceda al final, será el mejor resultado que pueda haber sido. - La sonrisa de ironía regresó a su rostro. - No puedo negar que el conflicto que surgió nos presionó a todos a dar lo mejor que teníamos.
El conflicto, la confrontación entre los Dioses, ¡aquella en la que se nos dice que Amaxis emergió victorioso! ¡Qué gran oportunidad para conocer los detalles del conflicto! - Se nos dice que Amaxis venció a unos Grandes Demonios y que así es como al fin se lograron la paz y unidad. Usted está mencionando un conflicto, el cual supongo que se trata del mismo y que aquellos supuestos Grandes Demonios eran en realidad los otros Dioses. Estoy muy interesado en conocer cómo empezó el conflicto, y todos los detalles importantes acerca de éste.
- Esa es una historia muy larga, pero te puedo contar los eventos más importantes. Todo empezó el día que fuimos hechos. El Creador nos presentó ante los otros Dioses. "He aquí los Dioses Dragones, los más grandes de mi creación. Todos ustedes habrán de alabarlos, admirar su esplendor y aprender de ellos, pues ellos serán sus amos y guías. Ustedes habrán de servirles y ayudarles en su tarea de dirigir el Mundo en el camino del mejoramiento constante en busca de la perfección.", les dijo. Esas palabras llenaron de temor mi corazón, era una gran responsabilidad. Amaxis lo notó y me reconfortó con una sonrisa alentadora.
- ¡Un momento! - La interrumpí. - ¿Amaxis era originalmente un Dios Dragón? ¿Cómo es que...? está bien, supongo que eventualmente llegaremos a esa parte. Perdóneme, por favor siga.
- Cada uno de los Dioses masculinos quiso medirse contra Amaxis, - continuó, - y literalmente los humilló en su propio juego. No lo tomaron para nada bien. Se hizo adicto al sentimiento de vencer a los demás, de demostrar que era mejor que los demás. Con el tiempo, se aburrió de ellos y buscó un oponente más fuerte contra quien competir. Desafortunadamente, yo era el único ser digno de semejante "honor".
Hizo una pausa, su tristeza regresó por un momento, luego se convirtió en ira. - Yo no trataba de competir contra él de ninguna manera, sin embargo él convirtió en una competencia todo aquello que hacíamos juntos, seguido de comentarios desalentadores y humillantes. Me cansé de su abuso constante. Un día, estábamos viendo la puesta del sol. A pesar de nuestros pleitos, él era muy bueno para compensarme por ellos con momentos como ese, pero en esa ocasión algo fue diferente. "La belleza de la puesta de sol es como nosotros dos juntos.", me dijo. "Mis escamas rojas son como el cielo carmesí, algo bello y que vale la pena observar, mientras que tus escamas doradas son como el sol, ¡hacen daño a los ojos!" Eso fue muy cruel, hirió mis sentimientos. ¡Fuimos creados para estar juntos! ¡No lo podía soportar más, así que emprendí vuelo y lo abandoné, ya no quería estar con él ni un momento más!
Su voz se quebró mientras dijo esas últimas palabras. Se quedó callada y de brazos cruzados por un momento, sus ojos llenándose de lágrimas. Decidí no presionarla y esperé hasta que decidiera continuar.
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